Un cura abandonó en forma intempestiva la misa que oficiaba en una Iglesia de Goiania, en el centro de Brasil, tras discutir con una feligresa que había votado a Luiz Inacio Lula da Silva en las elecciones del 30 de octubre.
El religioso se enojó a tal punto que pidió retirarse de la iglesia a todas las personas que votaron al presidente electo, según un testigo citado por el portal G1.
Algunos feligreses repudiaron la actitud del religioso e hicieron la letra “L” con su mano, un gesto que acompañó a los simpatizantes de Lula durante la campaña. Entonces el sacerdote se quitó la estola y la casulla, las prendas que los religiosos se colocan para celebrar misa, y abandonó la iglesia.